bitacora
ESPACIO PARA PUBLICIDAD
 
 

¿Todos somos candidatos?

imagen

Por Esteban Valenti (*)
Las elecciones del 2009 han dejado muchas secuelas en nuestro país, una de ellas es la sensación de que todos podemos ser candidatos y no a cualquier cargo sino nada menos que a la Presidencia de la República. Esto tiene cosas buenas, algunas no tanto y otras muy malas.

Aunque parezca contradictorio, esta sensación tiene vertientes distintas, por un lado a nivel del Frente Amplio surge de la candidatura a la vicepresidencia y posterior elección de Raúl Sendic, una figura casi sin trayectoria, proveniente de un pequeño grupo de ultra izquierda que luego se escindió del FA, con ningún papel en la estructura del FA ni en alguna organización importante política o social y sin ninguna formación académica o profesional destacable. De este tema mejor ni hablemos.

Luego de su elección aunque algunos conocían perfectamente la situación en el momento de nominarlo y elegirlo explotó en toda su magnificencia la crisis de ANCAP en su doble condición de, pésimos resultados económicos, empresariales y en general de la gestión en la principal empresa del país y el uso y abuso del cargo en ANCAP para promover su propia candidatura vicepresidencial. Con éxito y abusando de los recursos del Estado.

Por otro lado en condiciones diferentes, el joven Luis Lacalle Pou como candidato presidencial en el Partido Nacional que tuvo su dosis de sorpresa, también anima a unos cuantos a considerar que estábamos en pleno proceso promocional.

Se podría decir que incluso la figura de Edgardo Novick formando su propio partido y sin otra trayectoria que haber asesorado a Jorge Batlle en su campaña electoral y ser el candidato más votado de la Concertación en Montevideo colocó el tema de las candidaturas en la mesa de muchos comensales.

El remate de todo esto es sin duda la fuerte tendencia que existe en la sociedad y en la izquierda a que se deben renovar las cúpulas dirigentes y en especial en el Frente Amplio. Aunque algunas candidaturas como las de Mujica y Astori recién podremos tener claridad cuando se venzan los plazos legales y políticos. Hasta ese momento son solo especulaciones. Lo nuevo es que Raúl Sendic y Ernesto Agazzi, casualmente el mismo día vuelven a promover la candidatura de Mujica

Esto tiene cosas positivas, la política en un mundo y en partidos políticos uruguayos donde las ideas brillan, refulgen por su ausencia y cada día más nos refugiamos en la gestión y el surfeo de las situaciones, los nombres asumen creciente importancia.

Incluso hay que considerar nuestra historia, las figuras han tenido un papel preponderante en todos los partidos políticos uruguayos. Personalidades surgidas de diferentes maneras y con distintos méritos, políticos, intelectuales, parlamentarios, en la gestión o a nivel profesional.

Un caso particular es el de Tabaré Vázquez que alcanzó el cargo de intendente de Montevideo con escasa militancia y trayectoria política, pero con un alto prestigio profesional médico y con un papel en el fútbol uruguayo, pero que para llegar a ser candidato a presidente y, luego ser electo en dos oportunidades tuvo que cumplir un largo proceso, como intendente, como dirigente político del FA y en el ejercicio de la Presidencia. Lo cumplió y se fue ganando su espacio en la política nacional.

Yo me voy a ocupar de las candidaturas de la izquierda, los otros que se ocupen de sus propios desafíos, problemas y posibilidades.

No voy a mencionar nombres de los precandidatos, pero en la izquierda la danza es interminable y todos los días se agregan nuevos. ¿Es por qué tenemos una cantera interminable de dirigentes y personalidades? Permitan que tenga algunas dudas.

En general los nombres provienen de cargos gubernamentales o parlamentarios, difícilmente se encuentren otras figuras. Se cuela algún intendente. Obviamente que esa condición parte de un principio básico, deben ser figuras con cierto grado de conocimiento por parte de la gente.

Criterio bastante discutible si solo se restringe a la política, porque implica necesariamente que la renovación se produce dentro del reducido círculo de los que ya accedieron a la cúpula, a veces por votos a veces por cargos de confianza y no hay una mirada general sobre el conjunto de la sociedad, sobre los méritos y las capacidades políticas, institucionales y culturales con una visión más amplia. Eso enriquecería el menú y el debate de las condiciones requeridas para darle un nuevo impulso a los cambios y a la actividad política, bastante alicaída.

Agrego un concepto, si se trata de buscar entre los gobernantes, ¿no deberíamos buscar entre los más exitosos, los mejores en estos años y sobre todo recorrer el camino de independientes que han sido parte fundamental de la historia política del Frente Amplio?.

El hecho de que la candidatura de José Mujica a una segunda presidencia se siga manejando, con los clásicos meneos sobre los permanente reclamos de la gente a que se presente, es la confirmación de que el poder tiene una natural tendencia a auto reproducirse y garantizarse de las más diversas maneras su continuidad.

El otro elemento preocupante es que el aparato sigue siendo el árbitro supremo de todas las posibilidades, un filtro casi insalvable. Y el aparato reproduce aparato, es una ley casi matemática.

Los mecanismos de reproducción, incluyen un peregrinaje de los potenciales candidatos hacia los grupos y figuras definitorias del FA. Muy difícilmente alguien se siente con capacidades propias de alcanzar las cimas, sin el apoyo de las grandes palancas, mejor dicho, hoy en día, de la gran palanca, el MPP. Y hacía allí van muchos peregrinos.

Con lo cual a mí personalmente - no quiero involucrar a nadie - me genera una sensación de empobrecimiento y de cálculo por encima de todo, que lleva la política a niveles minúsculos y fortalece el proceso de colonización del FA. Es la reproducción en escala más grande del esquema MLN, MPP, 609. Se le agrega el Frente, nada menos.

Es un invento genial con el que yo discrepo totalmente. Es la política de los círculos concéntricos que funciona perfectamente en el FA porque a ello se agregan las alianzas, no motivadas por razones ideológicas o programáticas sino exclusivamente o principalmente de cargos. Yo te voto tu candidato a presidente tú me votas en tres departamentos mi candidato al senado. No especulo, es lo que sucedió Imaginemos por un momento esa lógica, ese mecanismo desplegado a todo terreno en la distribución de cargos, espacios de poder, etc etc etc. Y temblemos. No hay que ser un genio de la política para percibir esos fenómenos se han dado y se dan no solo en el FA, pero eso no hace más grave ese cambio radical, ese si realmente radical, en relación a la historia y la esencia del Frente Amplio.

Esos son los mecanismos, donde las aspiraciones personales o de grupo se anteponen a todo y que han ido cambiando la relación entre los ciudadanos y la política.

Un nuevo elemento hizo irrupción últimamente, las mujeres como protagonistas centrales y reales o como un nuevo pasito de condescendencia machista meneando el posible cargo a la vicepresidencia, sin que todavía se haya movido una sola ficha ciudadana. Es que algunos se ven venir la maroma y creen que pueden manejarla con floreros decorativos. Muy buena la reacción de las mujeres, a la altura de lo indignados que deberíamos estar todos los uruguayos. La presencia definitoria de las mujeres en el poder no es una conquista de las mujeres, sino un avance fundamental de toda la sociedad uruguaya.

Faltan dos años largos para las elecciones y esto recién empieza. Se trata de asegurarse localidades adecuadas para mirar el espectáculo o pelear por algo diferente. Elijamos desde ahora.

(*) Periodista, escritor, militante político, director de Uypress y Bitácora. Uruguay


Atrás

 

 

 
Imprimir
Atrás

Agrandar texto

Achicar texto

linea separadora
rss RSS