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26.12.22

7º Congreso de la Izquierda Europea: tres elementos para una salida de la guerra

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Por Luis Fazenda (*)

El debate sobre la guerra en Ucrania, la transición ecológica y la respuesta al avance de la derecha populista dominaron el trabajo del 7o Congreso de la Izquierda Europea que terminó esta semana en Viena.

1-El debate más encendido entre los partidos de la izquierda europea tuvo lugar en torno a la guerra de Ucrania. La exigencia de un alto el fuego no puede estar desconectada de una retirada de las tropas rusas en el territorio invadido el 24 de febrero y se debe articular con negociaciones políticas para obtener y consolidar estos pasos, abrir el apoyo humanitario y encontrar un camino hacia un acuerdo de paz. No es posible segmentar estos tres elementos, o asignarles un orden secuencial en función de cualquier lógica dado que es un proceso que está en curso, con unos tiempos y modos que aún no conocemos.

Ahora lo que sabemos:

El cese de fuego sin la previsión de la retirada del invasor suena a capitulación y entrega de parte de Ucrania. El crimen compensaría. La retirada de las tropas rusas sin propuesta de alto el fuego se confunde con la posición del imperialismo, reunido en la OTAN, y suena a escalada de la guerra para debilitar a Rusia en el ajedrez de las Potencias. La OTAN, organización agresiva del capitalismo dominante, ganaría la jugada bajo los escombros de los pueblos. La negociación política debería ser intermediada por las Naciones Unidas y recuperar todo el patrimonio de la Carta de las Naciones, en particular el respeto por la soberanía de los Estados y el principio de autodeterminación nacional, mediante una consulta popular legítima, si este es el caso del Donbass y la controvertida cuestión de la reunificación rusa. Todos los documentos internacionales a los que se ha suscrito el Bloque de Izquierdas postugués están en esta línea. Afortunadamente, el acuerdo de los partidos miembros fue posible, representando un salto adelante para todos.

2-La condena de Putin y la aventura imperialista de Rusia no puede distraernos del peligro de la expansión de la OTAN. Pero la expansión de la OTAN no explica absolutamente nada de la invasión rusa y, en cualquier caso, no se puede atribuir a la Federación Rusa un estatus de soberanía limitada sobre sus vecinos como en la época de Brezhnev. De hecho, como Estados Unidos tampoco puede reclamar esta soberanía sobre sus vecinos; lo hacen, pero violando el derecho internacional.

La izquierda europea condenó claramente la invasión rusa y consideró que esta invasión es cualitativamente diferente de los conflictos que surgieron en Ucrania en 2014. Tan potencialmente diferente porque es una acción imperialista rusa a gran escala y el pretexto para una escalada geopolítica global con amenaza de uso de arsenales nucleares. No dio así la razón a aquellos que piensan que el 24 de febrero supuso un mero empeoramiento del conflicto, que no fue resuelto por los acuerdos de Minsk, o justifican la guerra con la teoría de liberación de los rusos del "nazismo" ucraniano, como defienden Putin y sus generales.

Los congresistas muestran el lema del encuentro: Paz, Pan y Rosas

3-Las propuestas sobre las transformaciones socio-ecológicas se comparten como una urgencia planetaria, una necesidad histórica y una transición. La transición no es meramente tecnológica, ni sólo de reorganización de la producción y el consumo, la transición necesita mayorías políticas para ser justa y socializar la propiedad de los bienes comunes, destacando la energía.

4-El avance de la extrema derecha y su cortejo populista, negacionista y racista provoca inquietud sobre la continuidad de los estados de democracia constitucional. Se teme por los derechos individuales y sindicales, los derechos sociales y la paz. Todos los partidos incitan, más que proponen, a frentes democráticos antifascistas. Sin embargo, hay muchos grados diferentes de apreciación del papel de los liberales en este contexto, con muchos partidos señalando que una dirección liberal de esa larga lucha está condenada al fracaso, posición compartida por el Bloque. Podemos decir que estas fueron las lecciones que nos llegaron de Francia de las campañas lideradas por Jean-Luc Mélenchon.

Walter Baier, nuevo presidente de la Izquierda Europea.

5-El discurso final de Walter Baier, nuevo presidente de la Izquierda Europea, en el cierre del congreso de cuatro días en Viena, fue bastante afirmativo sobre la alternativa de una izquierda verde y roja, dejando de lado la sugerencia de Syriza para un frente con el PS Europeo y con los Verdes Europeos para las próximas elecciones europeas de 2024. ¡La acción política reclama convergencias contra la extrema derecha, pero no se puede hacer a expensas de la afirmación propia de la Izquierda! El Bloque de Izquierda portugués estará representado en la secretaría y la comisión ejecutiva de la Izquierda Europea.

 

(*)  Luis Fazenda. Veterano dirigente de la izquierda alternativa portuguesa, cofundador y diputado del Bloco de Esquerda.

Fuente: https://www.esquerda.net/artigo/os-tres-elementos-para-uma-saida-da-guerra/84290

Traducción: Enrique García


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